Este día fue designado por la Asamblea General de la Naciones Unidas el 1 de noviembre de 2005. La elección del 27 de enero se debe a que en la misma fecha de 1945, se produjo la liberación por parte del ejército soviético del mayor campo de concentración y exterminio nazi, Auschwitz-Birkenau.
En Israel, cada 27 de Nisán (de acuerdo al calendario hebreo) se conmemora también el Día del Recuerdo del Holocausto y el Heroísmo, según lo legisló el parlamento en 1959. Esta fecha fue elegida tras intensos debates acerca de lo que debía simbolizar el Día del Recuerdo. La discusión debatió básicamente acerca de si este día debía yuxtaponerse a un día de duelo y de ayuno ya existente en la tradición judía (como por ejemplo, el 9 de Av), o bien si había que dedicarle un día específico, independientemente de los ya existentes.
Se eligió el 27 de Nisán ya que, por un lado, esta fecha coincide con la rebelión del gueto de Varsovia y, por el otro, se establece una continuidad de eventos relacionados con la recordación, comenzando en Pésaj (Pascua Judía), continuando con el Día del Holocausto, luego el día de la Conmemoración de los caídos en las guerras de Israel, finalizando con el Día de la Independencia de Israel.
En Yom HaShoá, nombre con el que se denomina a esta efemérides en hebreo, suenan las sirenas durante dos minutos y todo el país se paraliza por un momento. Es un día realmente especial que no pasa desapercibido para ningún ciudadano.