Director del Museo del Holocausto de Curitiba Asesora al MIJ

El propósito de la visita de Carlos Reiss, director y curador del Museo del Holocausto de Curitiba, Brasil, fue asesorar al MIJ en el proyecto de reestructuración del recorrido de Holocausto que se decidió implementar, debido al exponencial aumento de personas que están agendando visitas. De hecho, para fin de este año se espera que 9.000 personas hayan conocido el Museo Interactivo Judío. 
 
Para conocer el funcionamiento del museo y entender al público chileno, Reiss participó en diferentes actividades. Estuvo en un encuentro con Ana María Wahrenberg, voluntaria del MIJ y sobreviviente del Holocausto, en reuniones con los líderes jóvenes para implementar una estrategia de enseñanza de la Segunda Guerra Mundial y en recorridos del Holocausto con público general. 
 
Por otro lado, Carlos Reiss donó material elaborado por el museo de Curitiba que explica qué eran los guetos y cómo los nazis los implementaron, lo que será usado en la nueva muestra. Por último, se estableció que Reiss supervisará el desarrollo del nuevo recorrido que estará enfocado en las historias personales de los sobrevivientes.
 
“La memoria del Holocausto debe ser universal” 
 
Tras el término de la Segunda Guerra Mundial, muchos jerarcas nazis escaparon hacia Latinoamérica con la esperanza de esconderse y no ser enjuiciados por los crímenes que cometieron durante el Holocausto. El fugitivo más conocido de todos, Adolf Eichmann – coronel de las SS y responsable de la Solución Final- vivió 10 años en Argentina antes de ser atrapado por el Mossad, el servicio de inteligencia israelí, el 20 de mayo de 1960. 
 
La Operación Garibaldi – que consistía en trasladar de manera clandestina a Eichmann hacia Israel para enjuiciarlo- impactó a todo el mundo. Es el único proceso judicial en Israel que ha terminado con la pena de muerte. Se han escrito varios de documentos, libros y documentales. 
 
Hoy, 58 años después, la acción parece muy lejana y podría ser perfectamente el guion de una película. Eso es lo que plantea Carlos Reiss, director del Museo del Holocausto de Curitiba, quien visitó Chile en el marco de un proyecto de colaboración con el Museo Interactivo Judío.
 
“El Holocausto comenzó hace 79 años. Muchos de los sobrevivientes ya no están y para las nuevas generaciones el tema se ha convertido en algo repetitivo. Por eso la educación debe ser colectiva, no podemos recordar la Shoá como un hecho que solo pertenece a los judíos”, explica Reiss. 
 
El objetivo del MIJ es que sus visitantes puedan entender, en primera persona, lo que significó el Holocausto y la responsabilidad que cada uno tiene para que estos hechos no vuelvan a ocurrir. Por lo mismo, la educación del Holocausto tendrá el énfasis en establecer que se trató de un período de la historia que afectó a toda la humanidad y no solo a un grupo específico de personas.